“Educación en el área sexual de la familia es necesaria para la orientación de los hijos”

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“Necesitamos un proceso de educación a nivel sexual que nos permita entender que así como nos preparamos en cualquier otra área de la vida, requerimos formación que haga conciencia en el uso del cuerpo, el disfrute del sexo y las consecuencias o repercusiones que tiene socio culturalmente un embarazado a temprana edad”.

La aseveración corresponde a Patricia Antonet Fourniller Roa, magíster en orientación de la conducta del Centro de Investigaciones Psiquiátricas, Psicológicas y Sexológicas  de Venezuela, a propósito de un ciclo de ponencias realizadas con motivo de la semana mundial de la salud sexual y reproductiva en  la Corporación de Salud del Estado Táchira.

A juicio de Fourniller, es necesario reconocer que todos somos sexuados y que hay demasiada información referente a la sexualidad, pero no hay manejo de la misma  que permita una educación que pueda ser difundida sobre todo en nuestros hijos acorde a su etapa de desarrollo.

“La familia es un pilar fundamental, pero lamentablemente le cuesta abordar estos temas con sus hijos adolescentes, porque precisamente lo desconocen; es decir, somos niños y no nos hablan de sexo, crecemos, nos volvemos adultos, nos casamos y formamos una familia, tenemos hijos gracias a la sexualidad pero no tenemos información del autoconocimiento sexual” dijo.

La especialista explicó que  el embarazo es una consecuencia de la sexualidad, así como el placer es una consecuencia de la sexualidad, razón por la cual, un niño o un adolescente necesita tener autoconocimiento sexual, saber como funciona su sexo y conocerlo, pero como de eso no se habla, cuando consigue una sensación, caricia o un primer contacto sexual no sabe que el cuerpo va a reaccionar de cierta manera y aunque exista información o métodos de control, sucumben ante el placer y luego pagan un precio muy alto como un embarazo no deseado.

Básicamente a los hijos adolescentes hay que enseñarles a conocer su cuerpo, hablarles de las consecuencias de la sexualidad, sin invadir su privacidad sexual, sin lesionar su autoestima y sin ofenderlos, para ello se recomienda que sean los padres los primeros que busquen la información sexual apoyados en los expertos en el área de sexología y lo conversen de forma cotidiana.

Destacó que los derechos sexuales son tan importantes como cualquier otro al área de la vida y en la medida que podamos conocerlos y entenderlos podremos: respetar al otro, gozar de igualdad y respeto mutuo con responsabilidades compartidas, tener privacidad sexual y  disfrutarla independientemente de la procreación, conocer los métodos anticonceptivos o de emergencia, sin discriminación presión o violación en nuestras vidas adecuados al contexto socio cultural en el que estamos viviendo y soportados desde el punto de vista de la objetividad. Fin Ricardo Rincón / Foto María Márquez

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