Entrenadores aurinegros
Cada entrenador mantiene una filosofía de juego particular, en esta edición conoceremos un poco acerca de Daniel Rosales y su filosofía “Nada es Imposible para Dios” acompañado de lo sencillo a lo complejo.
El estado Táchira se caracteriza por ser una región llena de deporte cada día, y sin lugar a dudas, el Fútbol es la disciplina que más copa los rincones de los 29 municipios de la región, siendo por excelencia el preferido por la gran mayoría.
Cuna de grandes jugadores profesionales, la región andina también se ha convertido en cuna de grandes entrenadores, formadores de nuevos talentos para la nación, entre ellos, nos encontramos a Daniel Rosales, nativo de la población de Cordero, quien a sus 28 años ya es un director técnico de talla internacional.
Inicios en el Fútbol
Los inicios de Rosales en el fútbol llegaron a temprana edad, “Chócoro” como es conocido en su natal Cordero, residía cerca del Estadio Alí Ramírez Roa y gracias al Sr Carlos Ángulo llegó a jugar por primera vez con la Escuela de Fútbol Menor Cordero (Esfutmecor), hoy día EDIC Andrés Bello F.C. La Marea Azul, de sus primeros pasos como jugador siempre veía a su primo Gilberto Rosales como ejemplo a seguir, pues siempre le acompaña a verle jugar en diferentes torneos.
Entre sus entrenadores de formación en Cordero estuvieron los profesores Edgar Sayago, Alexander Turpio y Richard Duque, quienes aportaron para que Rosales llegase al fútbol profesional.
Paso por el fútbol profesional
Rosales fue premiado en varias ocasiones por el Instituto de Deporte de Andrés Bello, por su alto desempeño representando al municipio de grandes anhelos, fue parte de la plantilla sub 17, sub 18, sub 20 y filial del Deportivo Táchira F.C., posteriormente lograría jugar con Lotería del Táchira F.C en segunda división del fútbol profesional venezolano.
De Esfutmecor a EDIC Andrés Bello FC
Chócoro comenta que al pasar por las aulas académicas de la Universidad nacional Experimental del Táchira (UNET), decide formar un proyecto de reestructuración del fútbol en su poblado, y permitir mayor pertenencia hacia el municipio en su totalidad “Me preparé académicamente en la UNET en la Carrera TSU en Entrenamiento Deportivo, tengo muchas anécdotas con profesores y amigos los cuales admiro y estoy convencido de que marcaron un gran presente en mi carrera como entrenador, inicie el servicio comunitario de la universidad en mi casa Andrés Bello FC, allí realice también mi trabajo de investigación profesional, y el resultado más grande que me ha dado el fútbol y la bendición más especial que me ha regalado Dios, es haber conocido jugadores que luego fueron y son los entrenadores y pilares fundamentales de este Club” detalla Rosales.
EDIC Andrés Bello F.C pasó de ser una escuela de fútbol del pueblo para convertirse en una escuela municipal con talante regional y proyección nacional, sus colores de amarillo y verde pasaron luego a ser azul y blanco, generando un nuevo patrón y modelo deportivo en Cordero, institucionalmente se ha convertido en una escuela de formación de las más respetadas en Táchira y cuenta actualmente con más de 350 chicos y 15 entrenadores, además de su plataforma administrativa.
El paso Por el Deportivo Táchira
El esfuerzo realizado por Rosales en la EDIC Andrés Bello le permitió estar al lado de los técnicos Luis Quintero, Juan Domingo Tolisano, y Daniel Farías, quienes colocaron su confianza en él para asumir la responsabilidad de captar 25 talentos del estado para afrontar el torneo nacional Sub 12 con el Deportivo Táchira F.C en el 2015, siendo su primer gran reto como entrenador.
“En 2015 vi la Gloria de Dios en cada paso que di, ese año también inicie con el primer equipo como analista de rivales (AT Audiovisuales), se logró un histórico en ganar el primer campeonato nacional en categorías menores para el Club con la SUB12 y se logró ganar el Clausura y la Estrella en el mismo año del Torneo absoluto del Fútbol profesional Venezolano con el profesor Daniel Farías, quien me dio su confianza para trabajar a su lado y a quien le estoy siempre agradecido” apuntó Rosales.
Luego de ser campeón nacional con la Sub 12 el Deportivo Táchira decide darle la responsabilidad a Rosales en asumir la categoría Sub 18, categoría previa a la profesional, reto en el que no defraudó y una vez más logró coronarse como campeón nacional “El 2016 fue un gran año, Aceptar a Dios como mi salvador y el único responsable de premiar el esfuerzo del hombre para glorificar su nombre, fue mi mayor paso, ese año nació en el Deportivo Táchira Sub 18 el mensaje NADA ES IMPOSIBLE PARA DIOS, Tras un torneo muy fuerte en el cual Lotería del Táchira fue nuestro gran rival, logramos ser Campeones Nacionales de la forma más especial. Con esfuerzo, constancia, dedicación y un grupo de jugadores muy talentoso que nos impulso a trabajar cada día para brindar conocimiento y motivación a sus metas” señaló el DT.
Este cuerpo técnico campeón estuvo conformado por: “Dios”, DT: Daniel Rosales, acompañado de los entrenadores Miguel Gutiérrez, Domingo Montilla, Sergio López, Daniela Serrano, Olinyer Oñoro, Alexander Pereira, Cristofer, Pastor Víctor Calderón y las esposas e hijos del grupo.
De “Chócoro” a Mourinho Tachirense
Desde chico Daniel Rosales ha sido conocido en su natal Cordero como “Chócoro”, heredado por su color de cabello y de su padre a quien también le llaman de esa manera, siendo una forma de cariño de su gente hacia él.
Dentro del mundo del balompié atigrado en la región muchos le llaman “El Mourinho Tachirense”, pues los resultados y títulos le acompañan como uno de los entrenadores jóvenes más exitosos, gracias al amplío estudio y dedicación empeñada para llegar a la cima, sin embargo, para Rosales no es tan importante le llamen de esa manera, pues considera cada Técnico tiene su propio estilo y se acopla según su idea de juego:
“Cada entrenador tiene su forma o método de enseñanza y respeto el nivel y calidad de cada uno de los cuales, trato de tomar lo más positivo para adaptarlo a mi forma de ver el fútbol y de impartirlo, me considero un formador de principios valores y carácter en mis jugadores”.
El sueño de Andrés Bello
Sobre su amado pueblo de Cordero Rosales dijo que es un sueño grande “Mi sueño es ver a un jugador de mi pueblo en el fútbol internacional, actualmente trabajamos para eso en (ABFC) tenemos más de 350 niños en formación con un grupo de entrenadores capacitados para impartir conocimientos, y sabemos ese día llegará en su momento” apuntó el DT.
Club The Strongest, Bolivia, un Reto de Altura
Finalizada la temporada del año 2016 las ofertas se avecinaban para dirigir primera división, e incluso segunda en 2017, pero como el balón no deja de rodar, a Rosales el pase se lo enviaron con empeine desde Bolivia, la altura de La Paz, le llamó para unirse al Club The Strongest, para ser el asistente técnico del DT César Farías, opción que no pensó dos veces, tomando vuelo como cóndor andino hacia la nación sureña “Bolivia llega gracias a la oportunidad que brinda Dios de conocer personas que aprecian y valoran el trabajo y conocimiento labrado en esfuerzo y humildad, hoy estoy a las órdenes del profesor César Farías, Lino Alonso, César “Champion” Marcano, trabajando el club más grande de este país “The Strongest” (El Tigre) con mucha ambición de aprender y dejar una huella en este club” señaló el ahora internacional Daniel Rosales, quien de su natal Cordero será el primer entrenador en estar con un club internacional en Copa Libertadores de América.
La familia siempre lo primero
Daniel Rosales es el hijo menor de la Familia Rosales Borrero, para “Chócoro” lo más importante y que marca cada paso de la vida es la familia, por ello para el DT, siempre sus padres serán el ejemplo vivo a seguir “Agradezco a Mis padres por ser un ejemplo de honestidad y esfuerzo a lo largo de mi vida, a mis hermanos(as) por siempre estar presentes para brindarme su apoyo, a Gilberto Rosales ejemplo de responsabilidad y capacidad, a mi esposa por estar en las buenas y en los momentos difíciles, a todos mis profesores, amigos, compañeros de labores y jugadores, todos son importantes y en especial a la familia Andrés Bello FC quienes me dan la mayor satisfacción que el deporte puede regalar: El cariño y aprecio” indicó el estratega.
El balón no deja de rodar, sigue siendo redondo y el cuadro del campo siempre tendrá dos arcos, uno para el ataque, otro para la defensa, las gradas siempre tendrán aficionados que viven con pasión este deporte, y los camerinos no cesarán de tener jugadores con muchos sueños, y allí siempre estará el entrenador, aquel que con sus conocimientos, paciencia y amor al fútbol dejará todo por ver a sus chicos estar en la cima de la vida y del balón rodar, siempre será ese líder muchas veces anónimos que nunca dejará de existir. FIN / Escrito por: José Manuel Chacón Imágenes: Cortesía Daniel Rosales
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