Miguel Ángel Muñoz y Ramón Sira Andrade, dos funcionarios de la Policía del Táchira que permanecieron 30 días secuestrados como rehenes en los calabozos del cuartel de prisiones del organismo policial, coincidieron en la expresión “nos aferramos al valor fundamental de Dios y la vida”.
Durante la transmisión este viernes del programa especial dedicado a la seguridad, el gobernador bolivariano, José Gregorio Vielma Mora consultó las impresiones de “los valientes funcionarios que estuvieron detenidos como rehenes”, a quienes también consideró como “héroes del Táchira por el horror vivido”.
La narración de los episodios que vivieron los agentes policiales, ratificaron los desafíos de la práctica policial, “es una experiencia que no se la deseo a nadie, un mes de angustia y de humillación constante. La mayor parte del tiempo estuvimos vendados”, comentó Miguel Ángel Muñoz.
“Sobrellevar una situación difícil y sometidos a las decisiones imprevistas de los privados de libertad, originan la preocupación natural siempre con el pensamiento proyectado a Dios”.
Sostuvo Muñoz, – Las amenazas de muerte fueron constantes -; al tiempo de reconocer “los riesgos que asumimos cuando entramos en la formación académica para egresar como agentes de la policía y recordar las técnicas de supervivencia”.
Noches sin dormir
Por su parte, Ramón Sira Andrade, relató las noches sin dormir y “aunque estuvimos separados – uno en la planta superior y otro en la planta baja – al sexto día nos colocaron juntos y podíamos conversar sobre la confianza hacia la institución policial”.
Relató el ánimo que caracteriza al ser humano en momentos de crisis, “siempre nos transmitíamos el ánimo sin desmayar el impulso de salir en cualquier momento de la pesadilla”.
Muñoz y Sira, coincidieron “en la confianza de las autoridades para la solución del conflicto que hoy agradecemos, para seguir con la tarea encomendada de velar por la seguridad del estado Táchira”
30 días de secuestro
Es importante resaltar que el pasado 8 de septiembre un grupo de reos recluidos en los calabozos de la Policía del Táchira tomaron como rehenes a 11 civiles y 2 funcionarios del ente comicial.
Este hecho duró hasta el 7 de octubre cuando autoridades regionales y del Ministerio del Servicio Penitenciario mediaron y ejercieron su autoridad para dejar en libertad a quienes un grupo de delincuentes les coartó el derecho a la libertad.
De este lamentable suceso, hoy las autoridades policiales están buscando los elementos criminalísticos para determinar las causas de cómo se presentaron los hechos con la finalidad de dar con los responsables de dos vidas que se perdieron entre el odio y la maldad. FIN/ Deivi Wilson Ramírez Fotos: Francisco Navas
