Aumentan los decesos en el Hospital Central por patologías distintas al COVID-19

Muchos son los puntos que preocupan al personal médico que labora en el Hospital Central de San Cristóbal (HCSC), primer centro asistencial en el estado y único centinela para atender a pacientes positivos para COVID-19 en la región, por ello, la gobernadora del Táchira Laidy Gómez informó que más de 700 pacientes han fallecido en este recinto hospitalario por patologías diferentes al virus SARS-CoV-2.

“Desde enero hasta julio del presente año, se han registrado más de 700 decesos   por patologías distintas al nuevo virus, pacientes que han ingresado al Hospital Central con otras enfermedades y algunos de ellos con altos grados de descompensación, mientras que por COVID-19 solo 17 tachirenses confirmados con prueba PCR han perdido la vida y 62 han muerto con sospechas de Coronavirus, pudiéndose conocer que el deceso fue producto de una enfermedad ajena a la COVID-19”, aseguró.

Estas cifras implican, señaló Gómez y según el criterio médico en la región, que el Hospital Central de San Cristóbal no puede migrar servicios vitales de asistencia, “por ello surge el planteamiento de que el centro de salud centinela, que además tiene sus áreas quirúrgicas activas las 24 horas del día, sea dividido en un 50% para pacientes COVID-19 y el otro porcentaje restante, para enfermos con otros padecimientos”.

“Ante esta situación se ha nombrado un equipo de trabajo conformado por: Ildemaro Pacheco,  Presidente de la Corporación de Salud (Corposalud); el doctor Leonardo Contreras, en representación de la directiva del HCSC; el doctor Carlos Saavedra, emergenciólogo encargado del área Covid; el doctor Renny Cárdenas, por la Sociedad Médica y Jorge Pernía, Secretario General de Gobierno”, explicó la mandataria regional.

 Los planteamiento que surjan de ese equipo de trabajo – aseveró- serán expuestos a las autoridades de los entes internacionales adscritos a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ya que se requiere de una inversión inmediata para destinar un pabellón quirúrgico especial para pacientes contagiados por COVID-19, pues no se cuenta con un área de tal magnitud ni mucho menos con los recursos que se requiere para tal fin.

Del mismo modo indicó la gobernadora tachirense se darán a conocer los planteamientos que surjan de otras áreas de servicio asistencial en el Hospital Central, como la unidad de nefrología, donde  los especialistas han solicitado sean atendidas las necesidades debido al  elevado  número de pacientes que ingresan con enfermedades distintas a la COVID- 19.

Urgen las pruebas rápidas y las PCR en el Hospital Central

Por otra parte, la primera autoridad del Táchira manifestó que los galenos han reclamado y con razones de sobra, que se tengan pruebas de descarte para COVID-19 destinadas al personal médico y de enfermería que labora en el hospital centinela, “pues deben preservar su salud e integridad física en medio de esta pandemia, ya que son los que más expuestos están al tratar con pacientes positivos o con sospecha del virus”.

No tenemos pruebas rápidas, no tenemos pruebas PCR para nuestro personal de la salud – enfatizó – pero sí vemos cómo en los batallones se cuentan con estas pruebas de diagnóstico para COVID-19 destinado a los militares, “por ello, no se puede hablar de funcionarios de primera ni de segunda categoría, pues los médicos y enfermeras también están exponiendo su vida para salvar a los demás”.

Lamentó Laidy Gómez que los militares venezolanos, no sean quienes ponen su vida por delante para garantizar la soberanía ni preservar la salud y la vida de los ciudadanos, “entonces de la misma manera como estos funcionarios tienen el privilegio y el acceso a las pruebas de diagnóstico COVID-19, es justo que también lo tenga el personal de la salud de la entidad, que día a día se expone al contagio”.

No es posible – reclamó- que no tengamos pruebas rápidas ni las PCR para aplicarle a un funcionario nuestro de la salud cuando presenta síntomas de COVID-19, “nos declaramos en sesión permanente porque existe la convicción de que así como la comunidad internacional ha escuchado al ejecutivo regional para otras peticiones, lo hará con estos nuevos planteamientos”.

También expresó Gómez, que confiando en la capacidad profesional de los médicos y enfermeras del estado, el Hospital Central no requiere de milicianos, sino de insumos, atención e inversión, “porque los héroes de las batas blancas manifiestan su disposición a enfrentar la pandemia, pero necesitan el apoyo y lamentablemente el Ministerio de la Salud no lo está brindando en este tiempo de COVID-19”.

Es importante destacar que los planteamientos expuestos anteriormente son el resultado de una reunión de trabajo que sostuvo con los jefes de servicio asistencial del Hospital Central de San Cristóbal, las autoridades de Corposalud y la Sociedad Médica del Táchira, en la Residencia Oficial de Gobernadores. 

Jeniffer Borrero – Prensa DIRCI.