Gobernador Bernal evalúa in situ situación del Complejo Hidroeléctrico Uribante – Caparo

La depredacion ambiental causada por el hombre en la zona y las consecuencias del fenómeno El Niño, constituyen los dos factores determinantes que han impactado de manera directa en la generación de energía en la entidad.

Así lo señaló el gobernador del ESTADO Táchira, Freddy Bernal durante recorrido de evaluación realizado este domingo en la Represa La Honda del Complejo Hidroeléctrico Uribante – Caparo.

Acompañado por diferentes medios de comunicación, en lo que de nominó un “recorrido amigable” la autoridad tachirense expresó que “Han bajado muchísimos metros el nivel del agua, donde efectivamente se genera la mayor cantidad de energía que se consumen no solamente en Tachira, Mérida, Trujillo, Norte de Barinas y Sur del Lago de Maracaibo”.

“Podemos observar el impacto de lo que se denomina el cambio climático y lo que se denomina el fenómeno de El Niño, que ha generado altísimas temperaturas desde finales de diciembre hasta los corrientes y que según los expertos en metereología señalan que este fenómeno podría impactar hasta el mes de julio”, indicó Bernal durante la inspección.

Ante esto, expresó su preocupación dado que las consecuencias se evidencian en el descenso del caudal hídrico en la Represa, “con una tasa de evaporación entre 11 a 15 centímetros de agua al día –agregando — El nivel mínimo de ésta represa es de mil 68 metros y estamos en mil 66 , lo que significa que estamos a dos metros de nivel mínimo, impactando de manera directa en la generación de energía”.

El otro fenómeno: la falta de conciencia
A lo largo del recorrido, que incluyó la zona de ingreso y seguidamente, donde se abren las compuertas del Complejo Hidroeléctrico; pasando hacia el antiguo Potosí, donde se observa la iglesia en todo su esplendor, edificación que en esta oportunidad cuenta a su alrededor con arbustos y una grama de un verde floreciente dando cuenta de manera silente del fenómeno que la descubre ante el mundo.

En paralelo, observó la autoridad regional junto al grupo que le acompaña como se viene desarrollando otro fenómeno: “la depredación del ambiente por falta de cultura, amor a la naturaleza y hay una situación de tala indiscriminada. Unos para sembrar y otros para vender la madera, pensando en el negocio particular, que lo que impacta en la vida del ciudadano”.

Al respecto, Bernal hizo una reflexión ante dicha situación. “Sino logramos parar los procesos de deforestación de toda la cuenca hidrológica que alimenta esta Represa tristemente en 40 años no habría represa sino un inmenso charco de agua; por supuesto impactando la vida de los tachirenses de la próxima centuria”.

El paso siguiente
Como parte del proceso de inspección y evaluación in situ llevado a cabo por la autoridad regional, aprovechó para anunciar los siguientes pasos a desarrollar.

“Está evaluación que hemos hecho va a servir para varias cosas:
Levantar un diagnóstico y discutirlo con el Ministerio de Ecosocialismo y con la GNB. Es necesaria una acción más contundente por parte de la Guardia Nacional Bolivariana y pasar de la charla a la acción – indicando que – Hay una ley que penaliza las acciones depredadoras al ambiente”.

Igualmente, indicó que se debe instalar la Misión árbol en el lugar para desarrollar efectivamente un plan de siembra y reforestacion, que a su juicio, ante el daño observado “puede durar años. Cuatro, cinco…una década completa sembrando árboles, especialmente a lo largo y ancho de las cuencas hidrográficas para que esto fortalezca la tierra y los cursos de agua”.

Sobre los cursos de agua que abastecen el acueducto del Táchira – precisó que estos – generan, normalmente, 8 mil litros por segundo de agua, lo que permite que Táchira sea uno de los estados de mejor abastecimiento de agua ; pero desde hace mes y medio se están produciendo apenas 2 mil 800 litros por segundo. “Eso es apenas el 25% del agua que genera la tierra, la naturaleza”.

Por otro lado, sobre el señalamiento constante de culpables, dijo que “acá la solución está en manos de la naturaleza y del hombre. La conciencia ciudadana de que se entienda que el negocio, o el usufructo personal no puede estar por encima de un estado y de un país. Y contribuir de alguna manera a parar el recalentamiento global”.

“Y por otro, en manos de la naturaleza, esperando que el fenómeno de El Niño no impacte hasta junio, sino que sea mucho menos y que empiece a llover copiosamente, que se llene el embalse y se empiece a producir la energía necesaria”, finalizó ./// Larissa Chacón. Prensa @gobernaciondeltachira